¡Como suena de distinta esta frase
si en los ojos de quien la pronuncia
se advierte aún el reflejo
de una noche distante!
¡Como suena de emotiva
si se aprecian los vapores de las nubes
impresos aún en sus pupilas
y se reconocen los valores
de esos instantes perdidos
admirando brumas!
En labios capaces de admirar cerrados
los cielos y las luces,
las lunas y las nubes
"dime cielo" suena a gloria,
suena a elogio,
suena a cariño,
suena tierno,
y si me apuras...
suena incluso cierto.